1. El chef fuera de base
Suponga
que está preparando una salsa para pasta y la receta le pide que cocine
el ajo con mantequilla y que, luego, agregue la cebolla picada. Pero,
¡oh sorpresa!, no la tenía lista. Rápidamente, usted hace los cortes,
mientras el ajo sigue su proceso de cocción, se quema y, finalmente,
arruina por completo la preparación. Moraleja: en la cocina hay que
tener todo listo, utensilios, herramientas e ingredientes antes de
empezar a preparar una receta. Tómese el tiempo suficiente para leer las
indicaciones de pies a cabeza. Es la única manera de tener buenos
resultados y evitar percances de último minuto.
2. Improvisar con el salero
La
sal es el condimento infaltable, pero a la hora de añadirla debe tener
en cuenta la cantidad y el momento justos. Si quiere dorar el alimento,
debe ponerla al final, pero si quiere sudar o transparentar verduras,
debe agregarla al principio. Si la va a añadir a los champiñones, hágalo
siempre al terminar la cocción, para que se doren y no suelten tanta
agua. La carne debe salarse en el momento de darle la vuelta, sobre la
corteza dorada, nunca en crudo, porque puede quedar seca y dura. Pruebe
antes de servir, para que los comensales no se lleven una salada o
insípida sorpresa.
3. El miedo al cuchillo
Los
cuchillos son los mejores amigos de un cocinero. Al contrario de lo que
se cree, mientras más afilados estén, menos peligrosa será su
manipulación. Cuando el cuchillo tiene poco filo, se ejerce mucha
presión sobre el alimento para cortarlo, y un mal movimiento puede
producir graves heridas. Nunca los lave con agua caliente, pues esta
práctica hace que vayan perdiendo el filo gradualmente.
4. Fritura o fritanga
Cuando
freímos y el resultado es grasoso, poco crocante y con un fuerte sabor a
aceite, algo hicimos mal. Para una correcta fritura, el primer secreto
es secar bien el alimento y calentar mucho el aceite. Cuando tenga la
preparación en el fuego, revuélvala suavemente. Retírela a un papel
absorbente y, solo en ese momento, agregue sal y pimienta. Evite
utilizar el mismo aceite por mucho tiempo.
5. La receta 'pegote'
Si desea que sus preparaciones queden con un hermoso y apetitoso
color bronceado, es muy importante tener en cuenta el control de las
temperaturas. La principal recomendación es que caliente la olla o la
sartén durante dos minutos, aproximadamente, antes de agregar el aceite o
cualquier otro ingrediente. De esta forma evitará que sus recetas le
queden sosas, sin color o, peor aún, que se adhieran a la sartén como si
hubiera utilizado pegante.
6. La carne tiene su ciencia
Algunos trucos para preparar la carne al estilo de los mejores
restaurantes: no la cocine recién salida de la nevera; séllela por lado y
lado, en una sartén bien caliente, para que se forme una costra
crocante y en su interior se mantenga jugosa; termine de cocinarla en el
horno, así evitará que se queme si la desea bien cocida; no la mueva
mientras toma color y jamás la corte recién cocinada, déjela reposar
unos minutos y, entre tanto, sazónela con sal gruesa, preferiblemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario